Reemprendemos nuestra marcha en una nueva categoría, "cadetes". Con el bloque completo que ya jugará el año pasado, lo que supone que cada chico sabe o debe saber cual el su papel en el campo y no tienen que estar buscando una ubicación. Ya la tenían y lo único que han hecho ha sido progresar a una nueva categoría. Es muy de agradecer que los chicos que tienen edad de infantiles hayan seguido jugando con sus compañeros, realmente no sé si son dos o tres pero creo que merecen una mención especial en este sentido por su compromiso tanto con el equipo como con cada uno de sus compañeros.
En cuanto al partido, creo que se notó el no haber jugado ningún partido previamente, lo que a la larga se tradujo en errores y sobre todo en unos minutos finales bastante fatigosos para la mayoría de los chicos.
El partido fue bastante igualado en casi todos los aspectos con la excepción de las expulsiones en la que creo que ganamos de forma autoritaria. Si bien es cierto que en algunas ocasiones las expulsiones creo que fueron rayando el límite de la rigurosidad, en otras ocasiones la balanza estaba desequilibrada puesto que cuanto menos aprecie un codazo dado con toda la mala intención de un jugador contrario y que el árbitro obviamente no vio puesto que si así hubiera sido debería haber conllevado la sanción correspondiente.
Dicho esto y centrándome en el partido encontré la carga de responsabilidad y los nervios que los chicos acusaron de esa falta de partidos que comenté anteriormente, ya que durante los primeros minutos ningún jugador con buena posición para haber tirado se atrevía y fue Víctor el primero en intentarlo y anotar, primer gol del partido, de la temporada y de la categoría.
Una vez roto el temor de los primeros minutos iniciamos ya lo que podríamos decir fue un partido normal. Esto implicaba lo que en muchas ocasiones hemos achacado, seguimos entrando solo por el centro y se ve que aun no controlamos perfectamente el bote del balón (corremos solo mirando el balón y nos cuesta una barbaridad levantar la cabeza para ver donde se encuentran el resto de jugadores), vamos lo que viene siendo la marca de la casa.
A pesar de todo el equipo el equipo presenta la cara al Sanse y se mantiene el el resultado, un gol arriba o abajo, la defensa es bastante buena y no nos hacen tiros cómodos, sin embargo encontré nuestro ataque bastante atascado, finalmente atacamos con tres o cuatro jugadores, el resto son espectadores de las jugadas y esta es la principal dificultad del equipo, mientras que en defensa intervienen los seis jugadores en ataque jugamos en inferioridad casi todas las jugadas y claro, el resto de los equipos terminan sabiendo donde tienen que defendernos. Pero luchamos, esa es una faceta importantísima del equipo ya que luchamos todos los balones y desde luego no lo ponemos nada fácil. Pero llega un momento que para mi marca el devenir del partido, en el que empezamos a acumular una expulsión tras otra, merecidas o no, pero que hace que nuestros chicos se vayan poniendo nerviosos, bueno, nuestros chicos y hasta el entrenador y creo que con una merecida razón. Y sin embargo seguimos compitiendo y luchando por el partido.
| Las caras de los chicos dicen bastante de la intensidad que ponen |
| Termino en gol, pero hubiera sido un penalti de libro |
Por último una secuencia de dos penaltis que tiró Fernando. Ahora viene el juego de las siete diferencias ¿quien las encuentra? Cualquiera diría que se trata del mismo penalti sin embargo son dos distintos con una secuencia exacta de movimientos... Cuanto menos curioso.
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