Empezábamos la segunda vuelta con apenas unas horas para descansar. Después de haber hecho un gran partido el día anterior, los chicos lo tenían claro, tenía que ser el día, además lo merecían.
Jugábamos en otro pabellón, que bueno, no se parecía al que juegan habitualmente, pero tampoco importaba mucho.
Empieza el partido y al rato ya estábamos perdiendo de dos goles. Entre los padres un poco de preocupación, pero pronto el marcador da la vuelta y nos ponemos uno arriba y empezamos como el día de ayer, uno arriba, uno abajo, empates......
Como el día anterior el partido sigue siendo competido y emocionante. Nuestros chicos se están entregando y eso se nota. Es verdad que se les sigue notando mucha inocencia, pero ni de lejos como cuando empezaron.
Me gusta la defensa, aprietan más y no permiten jugar cómodamente al contrario, eso está bien. En ataque siguen pecando de tiro blanditos......... algunos, otros son buenos balonazos. En definitiva se trata de un partido ya con mucha más entidad que cuando empezaron y es que los días de competición se tienen que notar.
Terminamos la primera parte uno abajo, pero las sensaciones son mejores, mucho mejores que en anteriores partidos. Queda mucho lugar a la esperanza y casi todos tenemos la certeza que este va a ser nuestro partido, SU PARTIDO.
Empieza la segunda parte y un penalti en contra nos pone dos abajo, en ataque dos tiros blanditos y otro gol que nos marcan y ya son tres, es la máxima diferencia que llevamos en contra. Una falta del Getafe, un gol de nuestro cañonero Guille, una parada de nuestro portero y una exclusión en la defensa del Getafe, la remontada está servida, en poco tiempo ya estamos por encima en el marcador y de hay hasta el final casi es un paseo.
Es curioso como cuando les sale todo bien, ellos mismos se crecen en el campo. Muchas veces lo he dicho, pero creo que es la verdad, les hace falta creérselo.
Primera parte
Segunda parte
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