Sin duda hoy era un día importante para nuestro equipo, o bien cambiamos por completo o bien acentuábamos el carácter demostrado (mejor dicho la falta de carácter) del sábado pasado. Ya se acabó pensar que somos mejores ahora hay que demostrarlo en el partido.
El Villaverde no es que fuera un gran equipo ni que fuera superior a nosotros, aunque por el arranque del partido pudiera parecer eso. Después de un arranque con un 6-2 fuimos capaces de ponernos a un gol y entre dos goles y empates fue desarrollndose una primera parte, que a pesar de estar perdidos en el inicio con una defensa tres-tres planteada por el Villaverde, supieron encontrar los huecos y terminar reventándola.
Finalmente terminamos la primera parte tres goles abajo, pero sin dar sensación de derrota. Seguíamos en el partido y aunque abajo en el marcador daba la sensación que podíamos hacernos con el partido.
Empieza la segunda parte y sigue la tónica de la primera hasta los 12 minutos más o menos que es cuando alguien inesperado toma el protagonismo del partido. En escasamente 2 minutos expulsa a un jugador nuestro dos minutos, saca tarjeta amarilla al entrenador y le expulsa 2 minutos (para quien no lo sepa, cuando esto ocurre hay que sacar un jugador de campo). ¿Por qué expulsa a Juan? Creo que fue por protestar, pero es que desde hacía unos minutos a nosotros nos pitaba incluso lo que no hacíamos y al equipo contrario le permitía hacer lo que quería (dobles, faltas, tirar desde dentro....) y claro con esto es normal que el entrenador se cabreara, lo hubiéramos hecho cualquiera. A partir de aquí el partido se acabó, realmente lo hizo unos minutos antes cuando el árbitro decidió que ya sabía quien quería que ganara el partido. Ante esto nuestros chicos entran en estado de desesperación y ya no defienden, ya no atacan y unos y otros equipos entran en "batalla" con el condicionante que el árbitro cada vez permite más a unos y menos a otros. Decepcionante fue el papel del árbitro que como digo decidió quien tenía que ganar el partido.
Un resultado que es absurdo, perdimos de unos 10 goles cuando a 10 minutos estábamos empatando o uno abajo. Pero es que si cogemos el acta vemos que el árbitro no fue a la escuela los parciales de ambas partes basta con sumarlos..... bueno pues si en el resultado final puso algo así como 32 a 20 (ya nos quitaba goles) en los parciales puso algo así como 20-16 en la primera parte y 22-14 en la segunda, que como todo el mundo sabe si lo sumamos da 32-20¿?
Bueno lo dicho un partido en el que nuestros chicos esta vez si corrieron lucharon e incluso improvisaron (alguna ayuda les daría el entrenador) pero que acabaron perdiendo gracias a la inestimable labor del árbitro. Basta decir que el desconcierto y la rabia de nuestros jugadores se tradujo al final del partido en lágrimas de impotencia por parte de alguno.
Así que solo me queda decir que este es el camino, que de esta manera se ganaran partidos, que también se pueden perder, pero que no habrá nada que objetar........ bueno quizás un arbitro imparcial.
Peor que perder, es la impotencia de sentir la injusticia a nuestro alrededor, pero no hay que dejarnos vencer, la vida es así, el juego es así...a seguir adelante chicos, no hay que bajar la guardia ni en los peores momentos, ¡fuerza chicos!
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